Pasaba días enteros en el hospital, cuidándole. Devolviéndole un poco de lo que él le había dado a lo largo de su vida. El desenlace era inevitable, pero siempre cuesta aceptar que ya no volverá a oír su voz, a sentir sus abrazos, a recibir sus consejos. Al menos eso me parecía a mi, acostumbrada a inventar lo que otros podían sentir.
No pude darle el pésame y un abrazo. No dejó que me acercara a él en un momento así. O tal vez solo volvía suponer que las cosas eran así. Pensé que mi presencia en el tanatorio sería un poco difícil de explicar, él no tenía la cabeza para pensar muchas cosas en aquella situación y yo no quería ser un problema.
Pasé veinticuatro horas sin tener noticias suyas y cada minuto que pasaba mi mente iba montando su propia película.
El domingo, bajo una lluvia torrencial, me acerqué al cementerio. Bajo el paraguas pasaba inadvertida, caminando lentamente hacia el tanatorio. Imaginando cómo sería el encuentro. No le ví, no hubo encuentro antes del funeral. Entré en la capilla ocupando uno de los últimos bancos y desde allí le vi entrar.
No estaba solo. No me necesitaba. Y desaparecí bajo la lluvia.
lunes, 1 de diciembre de 2014
domingo, 2 de noviembre de 2014
Egoísmo
martes, 16 de septiembre de 2014
Sueño y realidad
Dicen que siempre soñamos, aunque al despertar no recordamos los sueños.
Tal vez sea mejor así. Si alguna vez he soñado con él, si slguna vez, al despertar, recuerdo un sueño en el que aparece él, es para darme de bruces con la más amarga realidad... Yo estoy fuera de su vida, de su mundo.
Yo me quedo fuera. Como ese perro que dejan atado a una farola mientras su dueño come en el restaurante. Y allí espera a que salga un momento y le dé unas migajas.
lunes, 18 de agosto de 2014
Venecia sin mi
Hoy la tecnología no ha estado de mi parte y las redes wifi se escondían a su paso. Se que iba camino de Venecia y no puedo evitar imaginarlo en un romántico paseo pos sus canales. Recorriendo sus estrechas calles, pasando cada puente sobre los canales, paseando en gondola bajo el puente Rialto por delante de esos magníficos palacios que nos trasladan a otra época, para terminar con un café en la plaza de San Marcos.
Que profunda emoción en Venecia... sin mí.
domingo, 17 de agosto de 2014
A media luz
Después de la cena con el fresquito de la terraza, he cogido el coche (las llaves estaban en el fondo del bolso, que no es el fondo del mar pero cuesta lo mismo encontrarlas) pues, como decía, he cogido el coche y he puesto la calefaccion! Un dia no se cuantos de agosto. No se en que dia vivo.
Al llegar a casa me encuentro el salón con menos luz que en la terraza en la que había cenado. De los cinco halógenos ya hace años que uno no iba ni a la de tres. Justo antes de salir a cenar ha muerto otro de los halógenos, pero al volver a casa, como si se tratara de una epidemia, había caído otro. Ahora que caigo igual tiene algo que ver con la obsolescencia programada...
Bueno, a lo que iba. Con el salón a media luz como el tango, he decidido buscar los halógenos de repuesto que perdi hace tiempo y ¡eureka! Han aparecido. El caso es que estos eran para poner sin transformador. ¿Que se hace en estos casos a las doce y media de la noche? Una persona normal apagaría la luz o lo que queda de ella y se iría a dormir. Pero yo que soy más rara que un perro verde me he puesto como una loca a quitar transformadores y cambiar halógenos.
Ahora tengo el salon mas iluminado que nunca aunque creo que mañana tendre agujetas en los hombros de estar trabajando en el techo, y en las piernas de tanto subir y bajar la escalera.
sábado, 16 de agosto de 2014
Principio y fin
Ayer empezaron sus vacaciones y ya le echo de menos. No sé porqué, porque nunca está conmigo. Me gusta sentir, más bien imaginar, que hay alguien pendiente de mi, preocupado por hacerme feliz, en definitiva, alguien que me quiere. Ya sé que es pedir demasiado, pero soñar no cuesta nada.
Ahora que está de vacaciones siento una gran tristeza por no ser yo la que está con él. Así que, para no sentirme tan sola, he pensado escribir todas esas tonterias de las que le hablaría si estuviera aquí. Cosas sin importancia, cosas que no esperan respuesta, cosas que se dicen por decir... Hablar para saber que no estamos solos.
Esto puede ser el principio de algo. Esta mañana he recogido todas sus cosas y las he guardado en la misma bolsa en las que me las dio. El disco duro, la camara de fotos, el adaptador del ipad... Me engañaba diciendo que usarlas me recordarían más a él, y tal vez sea así. En el fondo me da rabia pensar que trata de compensar con cuatro chorradas materiales el tiempo que no puede estar conmigo.
Debo admitir que se ha tomado su tiempo para copiarme toda la música y las películas (que no creo que llegue a ver nunca) en el disco duro. Y que un poquito si me quiere. Pero eso no cambia las cosas. Yo seguiré pasando mis vacaciones sola y él no.
Esto no está resultando como esperaba. Solo me salen reproches y es lo último que quería.
Mejor lo dejo para otro día.
jueves, 14 de agosto de 2014
martes, 8 de julio de 2014
Mentiras bonitas
... No quiere dar por terminada su vida. Sueña, dice, con encontrar a un hombre que la quiera de verdad, que le hable con dulzura al oído y, si hace falta, le cuente mentiras bonitas.
"¿No es eso lo que nos gusta a las mujeres?", dice medio en broma, entre la guasa y la melancolia, "¿que nos cuenten mentiras?"...
(Antonio Muñoz Molina)
lunes, 30 de junio de 2014
Descendencia
Hierba mala nunca muere y encima procrea. Le odio cada dia más y me jode que le pueda ir minimamente bien.
Hay quien cree que pensar asi no nos deja ser felices, pero estoy convencida de que no ser feliz e imaginar que un hijo de puta pueda serlo, me hace sentir odio y rabia por todo.
Si hubiera una justicia universal estaría en el infierno... Por supuesto él.
domingo, 15 de junio de 2014
Luna de junio
Es un espectaculo contemplar la luna sobre el castillo. Blanca, redonda... dominando el negro cielo de una noche de junio. Se refleja en las aguas del mar dejando ver su movimiento casi hipnotizador.
Un cuadro vivo en el salon de mi casa.
Como me gustaría tener a alguien con quien compartir estos momentos. Sé que él diría lo mismo, pero la realidad es que yo estoy sola y que él nunca estará aquí, ni en ninguna parte conmigo.
Me dice que me quiere y no está conmigo. Aunque yo tambien le he dicho que le quiero y tal vez le esté mintiendo porque yo no sé lo que es querer, yo no sé querer a nadie.
Necesito sentir que le importo a alguien, que hay alguien que me quiere, que me necesita y que se preocupa por mi. Pero tengo los pies en le tierra, y por mucho que me diga, y por mucho que yo imagine de él, sé que estoy sola.
Sola como la luna en una noche de junio.
sábado, 12 de abril de 2014
Un nuevo momento
Tu momento. Así se llama uno de mis sitios favoritos para tomar un buen vino y comer unos arroces deliciosos. Ahora están de estreno y yo me lo vuelvo a perder. Mis amigos B. P. y B. F sí están allí. Cada vez es mas difícil coincidir, he llegado a pensar que me evitan.
Imagino que conoceré el nuevo momento en otra ocasión y, como siempre, sola.
lunes, 7 de abril de 2014
Tecnología para seguir sola
Me he hecho con el ultimo capricho tecnológico. Mi nuevo iPad. Y estoy como niño con juguete nuevo.
He descargado aplicaciones para estar conectada con el mundo pero en mi mundo no hay nadie. S.C. está distante. Tal vez es solo en mi imaginación, lo siento lejano, desconocido. ¿Por qué cambia tanto? La verdad es que no quiero pensar en ello. Hoy no ha sido un buen día, como otros muchos, y él no estaba a mi lado.
Y yo que pensaba que el iPad nos uniría.
jueves, 13 de marzo de 2014
Indiferencia pasajera
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